Como cada año, una nueva edición del Ranking de Los Mejores Lugares para Trabajar en América Latina nos deja un gran número de reflexiones y puntos de análisis.
Ser un gran lugar para trabajar no es sólo una posición en la lista, sino el resultado de políticas y prácticas organizacionales que construyen un espacio de trabajo diferenciado que lo hacen sobresalir. Y que, además, es un gran determinante del porqué los empleados lo eligen como “su lugar para trabajar” a largo plazo.
Uno de los aspectos fundamentales que se destacó en esta edición 2021 es el liderazgo. Y, a decir verdad, al analizarlo en retrospectiva se vuelve evidente que así sea si tenemos en cuenta que hace más de año y medio que el mundo entero vive bajo un estado de pandemia.
En este escenario de COVID-19, el rol de los líderes ha sido clave para mantener y promover el compromiso y motivación de los colaboradores. Más aún, de recrear un clima de apoyo y cercanía a pesar de las distancias inevitables. En consecuencia, el vínculo de confianza de los empleados se mantuvo y, en muchos de ellos, creció.
Los resultados de la encuesta revelan cómo aquellos lugares para trabajar que forjaron un liderazgo de apoyo y comunicación fluida con sus colaboradores fueron los que obtuvieron los mejores resultados a nivel satisfacción de sus empleados. En consecuencia, esto les permitió atravesar la situación de crisis de una mejor manera y con mejores resultados.
El liderazgo siempre ha tenido un rol preponderante en el éxito de toda organización, pero en tiempos de pandemia, se convirtió en una variable indiscutible. Asegurar el bienestar psicológico y emocional de los colaboradores y hacerles sentir la importancia del aporte de su trabajo, fue clave y determinante.
En la infografía a continuación desglosamos más a detalle los aspectos clave de este nuevo ranking.