1. Construye confianza
La confianza sirve como base para tener relaciones sanas, incluidas las del lugar de trabajo. Afianza el camino para la comunicación efectiva, la retención y la motivación de los colaboradores, y contribuye a la energía y al esfuerzo adicional que las personas invierten voluntariamente en su trabajo.
Puedes hacer esto entregando a un colaborador otra responsabilidad si crees que puede manejarlo. Incluso, si puede ser una tarea desafiante, pueden estar a la altura de las circunstancias simplemente porque aprecian la confianza que pones en ellos y quieren demostrarte que pueden manejar el trabajo.
2. Muestra respeto
El respeto es esencial en cualquier relación y es un requisito cuando el trato es entre la gerencia y los colaboradores. Pregúntale a cualquier miembro de tu organización qué trato desea en el trabajo y probablemente te dirá que es el deseo de ser tratado con dignidad y respeto.
Puedes demostrar respeto con acciones simples pero poderosas.
Un buen ejemplo de muestra de respeto es confiar en que los trabajadores realizarán las tareas para los que fueron contratados sin supervisión. Si algo no se está haciendo correctamente, abórdalo de una manera directa y profesional que detalle lo que debe corregirse.
3. Entrega feedback
El feedback es una herramienta de comunicación importante en un ambiente laboral saludable. Ayuda a la empresa a mejorar los procesos y muestra a los colaboradores que la organización está interesada en su carrera. Por ejemplo, un feedback periódico puede ser una herramienta útil para ayudarlos y, por consiguiente, ayuda a la empresa a crecer.
El feedback puede variar desde revisiones de desempeño detalladas y programadas regularmente que les permiten a los colaboradores saber cuál es su posición, hasta simplemente decir “buen trabajo”. También implica una crítica constructiva. Si los colaboradores están haciendo algo mal, quieren saberlo y quieren saber cómo corregir el problema.
4. Demuestra que los aprecias
No dudes en decirles a tus colegas y compañeros de trabajo cuánto los valoras a ellos y a sus contribuciones en el trabajo cualquier día del año. De hecho, pequeñas sorpresas y muestras de tu agradecimiento que se esparcen a lo largo del año ayudan a las personas en su vida laboral a sentirse valoradas. Hacerles saber que son valorados es un gran motivador que puede impulsar la productividad.
Por ejemplo, durante las reuniones de equipo, destacar los beneficios del proyecto reciente de alguien es una buena forma de reconocerlo públicamente y recordarle que su trabajo es valorado.
5. Reconoce el buen trabajo
El reconocimiento es una poderosa herramienta de motivación que, si se usa correctamente, puede estimular el desarrollo de los colaboradores y el crecimiento de la empresa.
Es importante reconocer a todos por su arduo trabajo, especialmente si todos cumplen con los mismos criterios. Seleccionar solo a unos pocos cuando otros también merecen reconocimiento, puede generar baja moral.
6. Retén a tus colaboradores estrellas
La retención de talento es fundamental para la salud y el éxito a largo plazo de una organización. Retener a tus mejores colaboradores debe ser una de las principales prioridades para garantizar un crecimiento continuo. Esto significa asegurarse de que tus trabajadores se sientan valorados por sus contribuciones como parte de un equipo que impulsa a la empresa hacia adelante.
Cuando los mejores talentos salen por la puerta sin luchar por quedarse, el mensaje que se envía al resto del personal es que la empresa no valora el trabajo de calidad.
7. Crea una cultura de coaching
Crea una cultura de coaching en la que los colaboradores compartan sus habilidades y conocimientos para ayudarse unos a otros a aprender y crecer. Establece un sistema de capacitación que incluya a alguien que tenga más experiencia y conocimiento que actúe como entrenador o mentor de otros colaboradores.
Esto también incluye varios otros consejos para mejorar tu lugar de trabajo. Al pedirle a un colaborador actuar como coaching, estás demostrando confianza en ese colaborador y reforzando tu aprecio por su trabajo. Aquellos que reciben tutoría ven esto como un medio de reconocimiento al que pueden aspirar.