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La forma de promover a las personas puede crear o quebrar la cultura | Great Place To Work® Uruguay

Escrito por Great Place to Work | Jan 24, 2018 5:00:00 AM
Gestionar los ascensos de manera efectiva es una de las formas más poderosas en que los líderes pueden impulsar el éxito de su organización. Cuando las personas creen que las promociones se manejan de manera justa y efectiva, tienen más probabilidades de planear un futuro a largo plazo en la organización.
 

Gestionar los ascensos de manera efectiva es una de las formas más poderosas en que los líderes pueden impulsar el éxito de su organización. Cuando las personas creen que las promociones se manejan de manera justa y efectiva, tienen más probabilidades de planear un futuro a largo plazo en la organización.

¿Pero por qué, incluso en los mejores lugares para trabajar, los ascensos suponen un desafío?

Las promociones son muy personales. En su esencia, son impulsadas por las relaciones y se encuentran entre los indicadores más importantes de cuán bien las acciones de los líderes se alinean con los valores de la compañía. Un proceso de promociones sólido permite a los líderes elevar el potencial de cada colaborador y a su vez demuestra qué tipo de resultados y comportamientos se valoran en la organización. Sin embargo, si los ascensos no son bien gestionados, el éxito de una persona puede fomentar sentimientos de resentimiento en otras y que las aspiraciones de carrera de los empleados queden sin realizar.
Los líderes pueden mejorar la efectividad de su proceso de promoción poniendo el foco en las personas en cada una de sus etapas.

Antes de la promoción: aclarar las aspiraciones. Preparar el escenario para los ascensos comienza definiendo las aspiraciones a largo plazo de cada miembro del equipo, para que ambos sepan cómo van a contribuir a medida que crece el negocio y cómo pueden ayudarlo mejor.

Cuando surge una nueva oferta de trabajo: alentar y respaldar. Una queja común que las personas tienen sobre la práctica de promociones es la sensación de que para cuando se publica el trabajo, la búsqueda ya está resuelta de antemano. Independientemente de cuán transparente sea la oportunidad, creen que ya hay un candidato preferido que obtendrá la posición. Esta falta de fe en el proceso, disuade a las personas de presentar una solicitud incluso cuando están interesados y calificados.
Cuando se publica un nuevo puesto no asumas que las personas que esperas que alzarán la mano lo harán. Cada líder debe alentar, respaldar y formar a las personas para que levanten la mano. Es importante permitir que aquellos que espera que apliquen sepan que incluso si no se sienten listos, se postulen, los ayudará a comprender lo que se requiere para el siguiente paso en su carrera.
Ninguna herramienta o sistema puede salvar una falta fundamental de confianza en el proceso de promoción. Lo que ayudará es un líder que se acerque cuando surgen estas oportunidades.

Una vez que se toma la decisión: generar aceptación. Todos tienen curiosidad por conocer a "quién" han ascendido. Sin embargo, la oportunidad de involucrar plenamente a las personas radica en explicar por qué se tomó la decisión. En lugar de reformular los criterios de la descripción del trabajo, comparta historias inspiradoras y ejemplos de cómo la persona cumplió consistentemente con los criterios, y también, cómo su promoción beneficia a un equipo más amplio.

Post-anuncio: volver a calibrar. Después de que se haya hecho el anuncio, cierre el proceso con aquellos que no consiguieron el trabajo (o ni siquiera lo solicitaron) para volver a calibrar. ¿Era el problema una cuestión de preparación ("no ahora"), aspiración ("esto no ") o un problema con la empresa en general ("no aquí")?

En todos los casos, el apoyo en este momento es fundamental para el éxito futuro de esa persona. Para aquellos del "no ahora", es necesario trabajar juntos para asegurar el desarrollo y la capacitación que necesitan la próxima vez que surja una oportunidad similar. Para aquellos que dicen "esto no", puede ayudar el pensar en la organización desde un punto de vista de inversión estratégica para ver qué otras oportunidades están mejor alineadas con sus aspiraciones de carrera. Para aquellos que tienen dudas sobre la compañía a largo plazo, puede indicar que no están interesados o que no se sienten apoyados para avanzar con el tiempo. Si cree que el empleado es una buena opción para la organización, vale la pena invertir el tiempo para comprender la situación y así poder determinar cómo apoyarla.

Al capacitar sistemáticamente a los líderes en cada nivel para usar estos principios dentro de sus equipos, los resultados serán notables a medida que más personas se reencuentren con sus aspiraciones, sientan un sentido de apoyo, extiendan la confianza a los líderes cuando se toman decisiones de promoción y obtengan entusiasmo con lo que es posible como un miembro valioso de un equipo exitoso.